miércoles, 18 de enero de 2012

La pobreza y exclusión social

La consideración del umbral de pobreza en un debate eterno en el que autoridades del mundo académico, económico y sociopolítico estiman el límite de ingresos por debajo del cual una persona es incapaz de satisfacer sus necesidades básicas.
La llamada evolución de la Humanidad es parcial, y se compromete a los poderes públicos y a la ciudadanía en la asignación de sus recursos para su erradicación.
Por eso surge la exclusión social que pretende superar la descripción homogénea del fenómeno, abarcar su multidimensionalidad y su carácter relativo y dinámico.
Conceptos y formas de medir la pobreza y la exclusión social
El concepto de pobreza tradicional siempre se ha referido al sentido de cantidad, que describe la desigualdad y marginación creada por la falta de recursos económicos.
El segundo significado de pobreza es de sentido cualitativo, es decir, se llega a la pobreza en las situaciones derivadas de la falta de oportunidades para la integración social.
Para medir la pobreza se realiza un juicio de valor en la toma de decisiones de organizaciones y gobiernos.
La pobreza relativa se considera a los pobres con un nivel de ingresos inferior a la media. La Unión Europea considera pobre a las personas por debajo del 60% de la mediana total de ingresos. Hay dos niveles de pobreza relativa: la pobreza individual leve, entre el 30 y 60%, y pobreza individual severa, por debajo del 30%.
Se sigue utilizando el concept de pobreza absoluta, como medida global del umbral de subsistencia. La pobreza absoluta es la privación severa en la satisfacción de las necesidades humanas básicas. La pobreza no debe medirse sólo según el acceso a bienes materiales y sociales; es necesario que permitir la libertad para procurar el bienestar.
Es necesario conocer el significado del Índice de Desarrollo Humano. Se trata de un indicador que mide los avances medios de un país, según la educación, la vida saludable y el nivel de vida medio. La causa principal del deterioro de la infraestructura económica se debe al VIH-SIDA. España se sitúa en el bloque de los países desarrollados.
Otro indicador de pobreza es a través del desarrollo de la infancia en los países. El informe UNICEF determina que la pobreza infantil no disminuye y que la situación ha empeorado.
La Unión Europea también utiliza el Índice de Gini, que se trata de una medida de desigualdad social que indica si la distribución de ingresos en un país es equitativa o no. Con este índice, se mejora la situación individual de pobreza relativa en las sociedades.
En España, el índice de pobreza se obtiene a través del INE, Instituto Nacional de Estadística. El umbral de pobreza, depende de la distribución de ingresos por persona y proporciona la tasa de pobreza relativa.
En la actualidad, el concepto de pobreza no está completo. Hay nuevos factores y colectivos que se van configurando para dar a conocer la situación real de la desigualdad social.
Es lamentable la situación de pobreza que está presente en el mundo, y más aún las desigualdades existentes. Si hablamos de injusticia social, podemos decir que en la actualidad se refleja en numerosos países, sobre todo de África, Asia y Sudamérica. Aunque, para hablar de igualdad, no tenemos que irnos tan lejos, ya que en nuestra propia ciudad, podemos percibirla.
No entiendo cómo podemos permitir que haya gente que muera de hambre, que no tengan cubiertas las necesidades básicas como son también la higiene o un hogar donde puedan vivir y educar a sus hijos.
Las únicas preocupaciones del motor y del pensamiento global del planeta es, a fin de cuentas, el capitalismo. Las preocupaciones que rondan en la cabeza de los dirigentes de las principales potencias es el poder económico, el desarrollo y el mantenimiento, o el llegar a ser, de unas de las potencias mundiales. No somos capaces de mirar y de ofrecer ayuda a aquellos que lo necesitan si con ello no obtenemos recompensa.
Me da pena estar en el punto en el que nos encontramos actualmente. Son pocas las personas que sin ningún ánimo de lucro, sin recompensas, sin obligación, sino que por altruismo y de corazón, son capaces de ayudar y de unirse a aquellos que viven circunstancias escalofriantes e intentan ofrecerle alguna ayuda para remediar sus problemas.
Cuando hablamos de pobreza, nos referimos a la cantidad, a la valoración del dinero. En eso, los países de Europa, EEUU, Japón y otras potencias que están resurgiendo, como puede ser el caso de China, son las principales potencias, pero ¿y si hablamos de valores? ¿También somos los primeros?
Una de las causas de este resurgir económico, de ser potencia mundial, nos lleva a una inhumanización radical. Cada vez valoramos menos el cariño, el amor, el respeto, la libertad, el derecho de libertad de expresión, la palabra…
Esto se debe, a que consideramos que es algo tan básico, y que está tan implantado en nuestra sociedad, que no nos damos cuenta que estamos perdiendo lo que realmente nos da la vida.
En este caso, a mi parecer, son los países más pobres económicamente, los que a la vez, son más ricos en valores. El día a día de estas personas es durísimo, pero son capaces de subsanarlo con una sonrisa, con una caricia o un abrazo. En cambio, en nuestra sociedad sólo se suscita el desea de querer y tener más. Le damos más importancia a lo material que a los valores en sí.
Para mí, lo material tiene menos importancia que la que pueda tener el cariño, el amor, la amistad…creo que la sociedad capitalista en la que estamos inmerso tiene que parar de alguna forma. Debemos acoger la importancia que tenían los valores, volver a sentir empatía, y a conseguir la igualdad en la práctica, y no sólo apalabrada, intentando realizar un mundo más equitativo e igualitario.
Exclusión social
La exclusión surge con la intención de recoger la descripción de los procesos de pobreza, marginación o desigualdad, afectan cada vez a más personas. La exclusión social es un proceso social de separación de un individuo o grupo respecto a las posibilidades laborales, económicas, políticas y culturales a las que otros pueden acceder y disfrutan.
La pobreza describe este proceso. La exclusión abarca las situaciones de insatisfacciones de las necesidades. Tiene desigualdad de situaciones y de posibilidades.
Se han creado áreas que conforman el concepto de exclusión social:
-          La heterogeneidad social: se ha producido un gran cambio en nuestra sociedad. Ahora nuestra sociedad se caracteriza por ser de gran diversidad cultural. Se ha convertido en una sociedad multiétnica, formada por personas de diferentes lugares con el objetivo de mejorar sus niveles de vida. También se han producido cambios en la familia, en el ámbito laboral, en el cuidado de las personas y en la socialización. También incide en la expansión de las etapas de la vida de las personas.
-          Transformaciones del mercado laboral: la flexibilidad en la contratación, las modificaciones de producción, y las nuevas tecnologías generan inestabilidad y vulnerabilidad, dificultando la búsqueda de trabajo, saber mantenerlo y mejorarlo. Lo importante hoy en día es estar bien formado para encontrar un trabajo.
-          Inadaptación de la política social: la diversidad de personas y grupos sociales que se encuentran en riesgo de exclusión obliga a la implantación de una política social adecuada a la situación, no una política social homogénea que no soluciona los problemas presentes.
-          Cuestionamiento del sistema educativo: existe un gran colectivo en riesgo de exclusión debido al abandono educativo precario. Hay que modificar el sistema educativo para motivar a los jóvenes.
El proceso de exclusión social tiene las siguientes características:
-          Estructural: es una realidad en todas las sociedades.
-          Multidimensional: las variables que intervienen son múltiples y se cambian de distinta forma e intensidad en cada persona y entorno.
-          Dinámico: la exclusión es una construcción social, determinada por unos factores de riesgo.
-          Acumulativo: las circunstancias se combinan y agravan entre ellas.
-          Global y variable: afecta a las personas en su conjunto, pero padecen sus consecuencias con diferente intensidad.
La exclusión es el proceso de factores que produce una ruptura del individuo con las posibilidades de desarrollo personal y participación social. Los factores con presencia en situaciones de exclusión pueden agravarse en el ámbito laboral, económico, residencial, educativo y cultural, personal y en el ámbito relacional y socio-político.


FACTORES DE EXCLUSIÓN
FACTORES DE INTEGRACIÓN
LABORALES
·         Desempleo. Precariedad laboral.
·         Temporalidad.
·         Carencia Seguridad Social.
·         Carencia en experiencias laborales previas.
·         Empleo fijo.
·         Pertenencia Seguridad Social.
·         Condiciones de empleabilidad.
ECONOMICAS
·         Ingresos insuficientes o irregulares.
·         Economía sumergida.
·         Ingresos regulares.
·         Fuente alternativa de ingresos.
RESIDENCIALES
·         Carencia de vivienda y medios.
·         Entorno social deprimido.
·         Hacinamiento.
·         Vivienda.
·         Entorno social equipado y saludable.
EDUCATIVAS Y CULTURALES
·         Barreras lingüísticas o culturales.
·         Pertenecía de grupos de rechazo.
·         Analfabetismo o baja formación.
·         Desinformación.
·         Desconocimiento de nuevas tecnologías.
·         Integración cultural.
·         Perfiles culturales aceptados.
·         Formación.
·         Cualificaciones demandadas.
·         Acceso a la información.
·         Manejo de nuevas tecnologías.
PERSONALES
·         Discapacidades, enfermedades.
·         Adicciones.
·         Antecedentes penales.
·         Violencia, malos tratos.
·         Débil estructura motivacional y actitudes negativas.
·         Capacidad e iniciativa personal.
·         Buena salud.
·         Motivaciones.
·         Optimismo, voluntad de realización.
·         Facilidad de trato.
RELACIONALES Y SOCIO-POLITICAS
·         Carencia de vínculos familiares fuertes.
·         Desarraigo.
·         Privatización de derechos.
·         Acceso restringido a la ciudadanía.
·         Situación administrativa irregular.
·         Apoyo familiar.
·         Red de relaciones sociales.
·         Pertenencia a asociaciones.
·         Participación social o política.
·         Conocimiento institucional.


Para Castel, los factores más relevantes en la aparición de la vulnerabilidad social se centran en los ámbitos representados en el cuadro. Se pueden distinguir tres zonas: la primera de integración en el trabajo estable y en la solidez de las relaciones sociales y familiares; la segunda zona de vulnerabilidad, caracterizada por la inestabilidad laboral o relacional y la débil protección social. La última zona es de exclusión, con un marcado aislamiento social.
La inclusión social es la capacidad de los individuos y grupos para mejorar su desarrollo personal y su participación social. Sus políticas y programas tienen como objetivo incrementar la autonomía, mejorar los lazos familiares, mejorar el nivel educativo y los roles personales y comunitarios. Los principales ejes de la inclusión social son:
-          Familia y capital social: es un pilar básico de desarrollo personas y de estructura social.
-          Participación en el mercado: la inserción laboral, mantenimiento personal y familiar, que facilita la autonomía de las personas.
-          Reconocimiento y participación pública: la persona se realiza en su relación social y comunitaria. La inclusión exige el ejercicio de la ciudadanía.
Evolución de los perfiles sociales de las personas pobres. La vulnerabilidad ante la pobreza y la exclusión social
Hay dos líneas de explicación de la pobreza: la individualista, son defensores de las circunstancias personales como la causantes de la misma, y la estructuralista, que tiene en cuenta el entorno en su aparición y consecuencias.
Las tesis individualistas eximen al Estado de cualquier intervención, porque la responsabilidad última de la pobreza es de la persona que ha generado esa situación. Las tesis estructuralistas favorecen los programas de intervención que aseguran unos mínimos de subsistencia e inserción a los ciudadanos que no pueden acceder a ellos.
No considero que la teoría individualista sea adecuada, porque el problema de exclusión, no es culpa completamente de la persona, también tiene responsabilidad el medio en el que se encuentra y la sociedad con la que se relaciona. Considero que es necesario ofrecer ayuda a las personas que lo necesitan, pero con esto, no me refiero a darle los recursos de los que carecen, sino ayudarles a formarlos para que ellos mismos puedan evitar las duras circunstancias a las que se han enfrentado hasta el momento.
Las teorías de la intervención social y las recomendaciones europeas insisten en reforzar las políticas de debilitamiento de factores de exclusión más que tratar las consecuencias.
Existen patrones de exclusión basados en las dificultades de inclusión en los ámbitos económico-familiar y sociofamiliar.
-          Mujeres con cargas familiares no compartidas: fenómeno de feminización de la pobreza; mujeres que han dedicado su tiempo al cuidado de la familia, con una cualificación laboral muy baja o nula, y sin ingresos. Al separarse sufren situaciones de vulnerabilidad, que les hace acercarse más a la exclusión.
-          Jóvenes en situación de fracaso o abandono escolar: procedentes de hogares con carencias socioeconómicas y culturales que abandonan con precariedad el sistema educativo. Tienen rasgos psicosociales que aceleran su proceso de exclusión; se automarginan. El rechazo a la escuela y la indiferencia de su familia les lleva a estar en la calle, donde comienza su vulnerabilidad social. La vida profesional es precaria e inestable.
-          Comunidad gitana: grupo social excluido de las relaciones económicas y socioculturales. Su vida se desarrolla alrededor de la familia. Este aislamiento refuerza los estereotipos y les lleva a la marginalidad económica. La evolución social ha provocado cambios positivos en la educación o la igualdad, una mejora en la percepción social de sus valores, por lo que hay una mayor inclusión social.
-          Adultos desempleados de larga duración; mayores de 45 años, en desempleo y con una formación profesional poco cualificada. Tienen graves dificultades de inserción laboral que les lleva a situación de exclusión personal, laboral y social. El paro les lleva a una inestabilidad psicológica de la persona.
-          Personas sin hogar: sufren la exclusión en todos los ámbitos. Suelen coincidir los problemas de salud, familiares, laborales o sociales. Las posibilidades de reinserción social están muy reducidas por la falta de motivación y las carencias, agravadas por las adiciones y trastornos.
Considero que es necesaria una intervención adecuada para estos colectivos desfavorecidos para insertarlos en la sociedad. Pero, más que tratar las consecuencias y ofrecerle las carencias que padecen, tendríamos que tratar los factores de exclusión y ofrecerle la ayuda para que ellos sean capaces de evitar y de tratar los problemas a los que se enfrentan.
Programas sociales contra la pobreza y contra la exclusión social
El programa más ambicioso contra la pobreza a nivel mundial es la Declaración del Milenio. Kofi  Annan, estableció ocho objetivos con la finalidad de abordar la pobreza y las desigualdades sociales en todas las variables a nivel mundial.
La declaración establece metas para cada objetivo. Los ODM son el compromiso más serio entre los países para intervenir en ellas. El logro es reducir la mitad la población que vive en pobreza extrema para el 2015.
Para ello se establecen tres pilares básicos: la ayuda internacional para el desarrollo, que crea las condiciones para un crecimiento económico, previene enfermedades y reduce la tasa de mortalidad, las desigualdades de género y mejora el nivel educativo, pero tiene un déficit de financiación y la ineficacia en la aplicación. También el comercio internacional, que presenta un gran impedimento para su mejora política, ya que los países ricos se imponen y niegan. Por último, la seguridad; los conflictos armados violan los derechos humanos y obstaculizan el cumplimiento de los ODM.
En la Comisión Europea, junto con la acción social de los Estados miembros, se comprometen a construir una Europa inclusiva con las acciones y programas de inclusión y al desarrollo de investigación y generación de conocimiento sobre los procesos de exclusión. El compromiso se fortalece en el Programa Europeo de Lucha contra la Exclusión Social, en el que se realizan programas para prevenir los factores de riesgo y exclusión, y mediante acciones, mejorar la intervención dirigida a personas y grupos en riesgo o exclusión.
Tiene, además, tres principios de intervención que se deben poner en práctica: la integralidad; intervención global y conjunta para incidir en el proceso de exclusión social, la coordinación; se pretende llegar a la integralidad a través de la coordinación. La descentralización tiene como base el acercamiento humano, conocer sus necesidades y demandas; por último, el Trabajo en Red; España tiene relevancia por el aumento de la privatización de la gestión de programas de servicios sociales.
De aquí se derivan a los Planes Nacionales de Acción para la Inclusión Social. En España se desarrolla la tercera visión. También, se asignan a las Comunidades Autónomas la responsabilidad de la planificación y gestión de los programas de prevención  e intervención en situaciones de exclusión social, a través de los Centros de Servicios Sociales. Tienen programas como las Rentas Mínimas que son conocidos como salarios sociales que forman parte del sistema de protección social. No es una paga, es un programa creado para personas que lo necesitan para tener las mismas oportunidades que los demás.
Los modelos pueden resumirse en:
-          Modelo de doble derecho; protección económica por parte de los estados, y a las actuaciones orientadas a su integración social.
-          Modelo de la contraprestación; los perceptores de la renta mínima están obligados a participar en determinados programas o intervenciones.
Sólo es descentralizado aquí en España, pero esta ventaja también puede llevar a la falta de comunicación entre las comunidades.
La cuestión final ha sido el riesgo de cronificación de la situación de precariedad o vulnerabilidad social y la posibilidad de reforzar la dependencia institucional de los perceptores.
Según Laparra, el principal problema es la falta de dinero y la escasez de hogares a los que llega. Las desigualdades y pobreza necesitan un nuevo sistema de protección social. La Renta Básica organizaría las prestaciones de protección social.
Los datos muestran la heterogeneidad de las Rentas Mínimas. Se observa la tendencia de feminización y la inserción laboral deficitaria como una de las principales causas de ayuda.
Las mujeres con bajos niveles académicos y sin trabajo son el grupo mayoritario al que destinan estas ayudas.
Hay que cambiar de alguna forma las intervenciones para erradicar la pobreza y poner fin con la exclusión social. Uno de los problemas es la falta de presupuesto para poder llevar a cabo las intervenciones y las ayudas económicas hacia estas personas para solventar sus problemas. Pero por esta razón, es por lo que considero que es indispensable trabajar con el colectivo o con la persona en riego de exclusión social, para poder formarlos y ayudarles a tratar y a hacerse frente ellos mismos a los problemas que se les presentan en la vida.
Lo que no podemos permitir es que se vuelvan totalmente dependientes a las ayudas ofrecidas por el Estado por las diferentes instituciones que se dirigen a la ayuda de las personas con estos problemas. Lo que se pretende con la intervención es la inclusión e integración social, a paliar la pobreza y potencializar los derechos humanos básicos, de los que no disfrutan estas personas, y conseguir que se vuelvan personas independientes capaces de enfrentarse a los problemas que se les presente en un futuro.






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